El savoir-faire de la tradición

La especialidad original de Mariebel, la pasta de hojaldre, está fuertemente arraigada en la cultura gastronómica francesa y sigue muy presente en la cocina de cada día.

El secreto de la elaboración de los hojaldres se resume en dos aspectos. El primero es la selección de los mejores ingredientes que, al ser pocos y sencillos, han de ser elegidos con rigor y criterio para que aporten la calidad idónea como materia prima.

Nuestra región ha sido privilegiada en este sentido. Por ejemplo la calidad de sus harinas, ingrediente básico en nuestro oficio y cuya importancia se refleja en la incomparable abundancia de molinos históricos en La Vendée. Como tributo a esta tradición, la imagen de nuestra marca reproduce uno de ellos.

La segunda y definitiva clave para obtener una calidad superior está el método de elaboración adoptado. Específicamente en la producción de hojaldre, en Mariebel únicamente utilizamos el llamado indistintamente método clásico o francés. Siendo el proceso más fiel a una artesanía con más de cuatro siglos de historia, es el único método capaz de asegurar el sabor y la textura que esperamos del mejor hojaldrado.

Nuestro compromiso con la calidad. Nuestras certificaciones.

Los productos y las instalaciones de Mariebel han recibido certificaciones oficiales que homologan su calidad y atestiguan la plena seguridad alimentaria que ofrecen, bajo el estricto control de diversos organismos oficiales, nacionales e internacionales.

· IFS · RSPO

Estos avales son importantes como prueba de nuestro compromiso en ofrecer al consumidor una indiscutida calidad en todo lo que hacemos. En este sentido entendemos la calidad como un concepto muy amplio, que hoy abarca también el respeto medioambiental, el responder del origen de los ingredientes que empleamos y del cómo y en qué condiciones se elaboran para obtener nuestros productos.